Autodefinidos y crucigramas

Cuando pienso en mi abuelo me pregunto si ese mito de que todo niño nace con una barra de pan debajo del brazo se rompió con él, porque estoy segura de que si mi abuelo nació con algo debajo del brazo fue con un libro de crucigramas o autodefinidos... Cada día después de comer, (exceptuando el domingo) mi abuelo se queda sólo en la cocina, enciende la radio y abre su libro de crucigramas o autodefinidos... creo que si no los tirara cuando los acaba tendría cientos, miles....y os aseguro que no exagero!! Muchas veces yo voy a la cocina, y me siento a su lado; leo las definiciones y la palabra que se me ocurre no suele encajar en el hueco... Nunca he entendido como puede acertar siempre mi abuelo...quizás son los años que hacen a uno sabio, o que ha hecho tantos en su vida que ya las definiciones se repiten... Yo, soy incapaz de acabar un autodefinido o un crucigrama, pero tienen tanta similitud con la vida que a veces hasta me asusta...¿ cuántas veces has vivido una situación en la que estás tan perdido que cuándo se te ocurre cómo definirla y te arriesgas a apostar por ello te das cuenta de que no has hallado la respuesta correcta? Para mi, en mi vida, eso es un autodefinido o crucigrama... pero la mayoría de las veces en vez de faltarme letras, me faltan ganas...